
Movimientos en el Ejecutivo
Desde su reciente designación como ministro del Interior, Juan José Santiváñez ha intensificado su presencia política al mantener una serie de reuniones en Palacio de Gobierno con importantes autoridades civiles y militares. Según información revelada por investigaciones periodísticas, su despacho ha sido visitado por altos mandos de la Policía Nacional, directores de inteligencia, congresistas, ministros de Estado, así como autoridades regionales y municipales.
Presencia de altos mandos y autoridades políticas
Entre las visitas registradas destacan la de generales de la Policía Nacional del Perú (PNP), responsables de áreas sensibles como inteligencia, orden interno y control territorial. Estas reuniones han sido vistas como parte de un esfuerzo coordinado para fortalecer el control operativo de las fuerzas del orden, en medio de una coyuntura marcada por la inseguridad ciudadana, el narcotráfico y el crimen organizado.
Asimismo, se ha reportado la llegada de alcaldes distritales y gobernadores regionales, lo que indicaría un interés por establecer una línea directa de coordinación entre el Ministerio del Interior y los gobiernos subnacionales, particularmente en regiones afectadas por conflictos sociales o redes delictivas.
Congresistas y ministros también acudieron a su despacho
La presencia de congresistas y otros ministros del Ejecutivo en el entorno inmediato de Santiváñez también ha sido objeto de atención. Aunque no se han revelado detalles precisos sobre el contenido de estas conversaciones, el contexto político sugiere que podrían estar relacionadas con negociaciones presupuestales, medidas de seguridad interior y posibles reformas institucionales dentro del sector Interior.
Estas visitas han despertado preocupación en algunos sectores políticos y de la opinión pública, especialmente por la falta de transparencia sobre los temas tratados y la continuidad de reuniones de carácter reservado, que en otros contextos han derivado en decisiones controversiales.
Implicancias políticas y de gobernabilidad
El activismo político del ministro Santiváñez en Palacio parece proyectar una figura de poder e influencia más allá del rol técnico que le corresponde. Su cercanía con mandos estratégicos de la Policía y actores del Congreso le confiere una posición de relevancia dentro del gabinete de Dina Boluarte, lo que podría tener implicancias en la definición de políticas de seguridad y en la reconfiguración de alianzas al interior del aparato estatal.
Por otro lado, algunos analistas advierten que esta concentración de interlocución directa con múltiples niveles de poder podría alimentar tensiones institucionales, en especial si se percibe un intento de centralizar decisiones que deberían pasar por canales colegiados o normativos.