
La jueza Julieta Makintach fue apartada del proceso judicial por la muerte de Diego Armando Maradona, luego de revelarse su participación en la grabación de un documental clandestino sobre el caso. El escándalo estalló cuando la Fiscalía presentó como prueba un guion y el tráiler de la serie, donde Makintach aparece como protagonista, recorriendo los pasillos del tribunal y hasta dando declaraciones personales.
Durante una audiencia realizada en los tribunales de San Isidro, Buenos Aires, tanto las defensas como las querellas respaldaron el pedido de recusación de la magistrada, decisión que fue aceptada también por la propia jueza. El presidente del tribunal, Maximiliano Savarino, confirmó su apartamiento y convocó a una reunión urgente con las partes para definir el futuro del proceso, que ahora corre el riesgo de anularse o reiniciarse desde cero.
El material audiovisual, que incluye imágenes de la jueza en su casa preparándose para acudir al juzgado y frases como: “Toda mi vida me preparé para esto, la vida o Dios me puso aquí para hacer justicia”, provocó indignación generalizada. Savarino calificó la situación de “sumamente grave” y dejó constancia en actas del apartamiento inmediato de Makintach.